Denuncian terrible historia de violencia y abusos sexuales y detienen a una persona en Berisso

La víctima es una nena de 11 años. La Policía detuvo ayer a un hombre en la puerta del Polígono Industrial de Berisso. "Siempre hubo golpes y maltratos, de acuerdo al testimonio de la madre de la víctima, y las separaciones se volvieron costumbre", dijo la madre de la menor

 

Un hombre que se hizo pasar por pastor evangélico, fue detenido ayer por personal de la DDI La Plata, acusado como presunto autor del delito de “corrupción de menores agravada y abuso sexual agravado”, en perjuicio de una menor de 11 años.

El operativo, que encabezó la subcomisario Laura Paiva, se desarrolló ayer por la tarde en la puerta del Polígono de Berisso, en las calles Entremuros y Marsella, cuando el sospechoso salía de trabajar.

Al parecer, cerca de las 17.00, en momentos en que se desplazaba en una motocicleta, los efectivos le salieron al cruce, lo redujeron y le notificaron las razones por las cuales iba a ser demorado.

Sin bien la orden de captura ya había sido emitida con bastante anterioridad, fuentes de tribunales indicaron que “se las arreglaba para mantenerse en la clandestinidad y burlar el cerco policial”.

Siempre hubo golpes y maltratos, de acuerdo al testimonio de la madre de la víctima, y las separaciones se volvieron costumbre

La causa que llevó a prisión al acusado, de 36 años, es investigada por la fiscal Ana María Medina, quien en las próximas horas lo indagará por los graves delitos de mención.

Según expuso ante los pesquisas la esposa, de quien no se brindan datos para preservar la identidad de su hija, la pareja se conoció cuando la denunciante se encontraba internada en un instituto de Bahía Blanca.

Fruto de esa relación, pese a la corta edad en la que se vincularon sentimentalmente, nacieron tres hijos, entre ellos la víctima, aunque aún no fue reconocida como tal.

Siempre hubo golpes y maltratos, de acuerdo al testimonio de la mujer, y las separaciones se volvieron costumbre.

Sin embargo, pese a esos cortocircuitos, el hombre lograba reencausar la relación, bajo promesas de cambio, que nunca llegaban.

La mujer contó que cuando quedó embarazada de la chica que habría sufrido los abusos, dejó de ver a su marido por espacio de 10 años.

“En el año 2006, por medio de una amiga que tengo en Bahía Blanca, (...) obtuvo mi número de teléfono, empezamos a hablarnos y el me dijo que se había convertido al evangelio luego de salir de la Unidad 25, donde estuvo preso por una tentativa de homicidio”, narró.

En esas circunstancias, tras un viaje a La Plata en marzo de ese mismo año, la pareja volvió a convivir y no tardaron en incorporar a los hijos, que habían quedado a cuidado de unos familiares.

UNA PESADILLA

Sin imaginarlo, su hija comenzó a ser blanco de supuestos abusos de parte del hombre, que salieron a la luz cuando la chica contó en la escuela lo que le pasaba.

De inmediato, la directora de ese establecimiento educativo, ubicado en Montevideo y 12, citó a la madre y la puso al tanto de la situación.

Posteriormente se hicieron los trámites legales de rigor y la Justicia local requirió la detención del imputado, que recién se pudo concretar ayer en la puerta del Polígono de la vecina ciudad.

Sexo oral, tocamientos, penetración, películas pornográficas. La menor, según el reporte oficial, era blanco de aberrantes prácticas, todo bajo amenazas de sufrir represalias si llegaba a contar algo.

La mujer, más allá de ver algunas situaciones extrañas, nunca pensó mal y hasta se enojaba con su hija si molestaba al marido.

APOYO CLAVE

De todas formas, según allegados a la denunciante, la participación de la directora de la escuela fue fundamental para la resolución del caso.

“Se puso al frente de la situación, asistió a la familia en todo momento y se encargó de que se realizaran todos los exámenes, tanto clínicos como psicológicos, para confirmarla existencia del delito”, destacó un informante.

“La investigación no termina con la detención de esta persona. Va a seguir adelante, porque hay varios que lo encubrieron durante todo este tiempo y permitieron que, pese a la orden de detención, pudiera estar en la calle como sin nada”, concluyó.